Amor fragmentado

Momentos de amargura con otros de felicidad. Son parte de una relación de pareja normal, pero llegamos al punto de un amor incompleto. Nos amamos pero no podemos estar juntos, ya la vida se encargó de decirnos eso una vez pero aún así intentamos cada vez que podemos.

Somos polos opuestos pero nos repelamos porque no nos ponemos de acuerdo. Somos dos bueyes macho que no podemos estar en el mismo campo pero no cambia nuestros sentir del uno por el otro, no nos saciamos y queremos pretender que podemos apagar la llama con una gota de agua.

La cantidad de veces que peleamos son incalculables, las discusiones infinitas, quizas podamos contar los besos, abrazos y expresiones de amor, lo cual debe ser al reves. No sabemos ni lo que queremos como pareja; pero si sabemos que queremos como individuales.

Somos un rompecabezas porque nos unimos y rompemos cuando queremos. Nos cansamos uno del otro en cuestión de tiempo pero ese mismo tiempo es que nos toma retomar nuestra unión.

Nos amamos como cualquier pareja, tan intenso que es indescriptible. La pasion se desborda y perdemos la cordura, pero peleamos de la misma manera.  Son lapsos de amor que vivimos, palabras que apenas se dicen, abrazos que no se dan, besos perdidos que no encuentran su hogar. Sentimientos que se encuentran y se pierden, nada es completo.

Y así nos las pasamos, juntándonos, alejándonos, felices, tristes, molestos, alegres, unidos, separados...viviendo momentos únicos, buenos pero a la misma vez terribles.  Viviendo un amor fragmentado...

Mis cadenas de amargura

Soy una persona como cualquier otra, tengo mis defectos y mis atributos.  Estoy rodeada de un mar de sentimientos malos y buenos, oscuros y puros. Todos se conectan como una cadena, con una atadura, siempre unidos.

Los momentos de oscuridad me definen, mientras que las cadenas de amarguras me dominan.  No son de metal ni tampoco me tienen atada, son las invisibles que me atrapan emocionalmente. Tienen el tipo de atadura que no se rompe con una tijera porque depende de mi misma.  Me lleno de espejos reflejando una imagen borrosa e incierta; y lo transmito cuando camino.

Las sombras me siguen por gusto, y la nuble gris es parte de mi vestimenta.  Aunque todo sea parte de ello, los colores mueren de momento.  La amargura es invisible pero ataca y sus golpes son casi imposibles de evitar.  Mientras todo esto ocurre, sigo mi rutina normal, como si nada pasara; mientras que por dentro estas cadenas me consumen.

Emocionalmente ando indecisa, llevo demasiada carga pesada en mis hombros, no encuentro salida de esta atadura.  Tengo 20 salidas que no puedo ver y solo termino cayendo en el mismo abismo.
Todo es una conexión, todo está unido. Y estas cadenas me atan a sentimientos que cambian mi modo y mi ánimo.  Es difícil romper este nudo, mientras me ahogo nadando aquí...no hay palabras que lo cambien, aún no conozco la clave para encontrar la llave que me desencadene.

La salida no existe cuando la solución no está clara. Peor cuando los sucesos solo hacen que las cadenas se enreden y se aten más unas a otras.  Romperlas requiere mucha paciencia, comprensión, amor, pero sobre todo tiempo, ya que es la mejor llave que pueda existir. El resto depende de mí.

Mis cadenas de amargura las cargo conmigo siempre, pero todo depende si deseo usarlas o no...

Nunca fui lo que quisiste

Nací de una manera y no puedo cambiar. Trataste de desarrollarme a tu modo pero no lo lograste.  Fui parte de tu invento para la eventualidad pero no tengo que ser igual a ti, aunque te duela soy así.

Soy parte de tí pero no soy tú, tengo cosas de tí pero no son tuyas. Tenías un plan en mente pero algo se te olvidó, que yo era parte del plan pero no fui la parte planificada. Los cálculos fueron perfectos y soy una creación divina pero no se ejecutaron como debieron y eso fue lo que no te gustó.

Tengo mi propio pensamiento, mi propia auto-crítica, mi manera de ser y mi persona. No somos iguales, nos parecemos pero jamás iguales.  Tu plan era único para mí pero ya mi plan estaba escrito y no era lo que escribiste tu.

Nunca fui lo que quisiste porque me convertí en algo no deseado, hice lo que tenía que hacer pero de todas formas no logré complacerte; por la sencilla razón que hice las cosas a mi modo.  No quise que las cosas fueran así pero no me dejaste opción, ya que no me escuchabas ni estabas cuando te necesitaba.  ¿Me dejaste de querer porque no hice lo que querias? eso es lo que parece ser...

Siempre quise tener una hermosa relación pero no se puede si una de las partes no quiere cooperar con la causa. Se que no soy lo que querias que fuera pero logré mucho más de lo que deseaste y tristemente no puedes ver eso con ojos abiertos. Siempre las diferencias causaron distancia, lo cual nunca quise.

Me entristece saber que esta es la realidad, que a pesar de que hice mucho bien, a ti no te agradó porque no fue lo que quisiste de mi para ti.  Soy parte de mi propio plan porque es mi vida la que vivo y quiero que sea lo que yo quiero. Mi mayor deseo es que alguna vez veas que aunque nunca fui lo que quisiste, me he convertido en algo que puedes querer.